Aunque autoridades señalan que han avanzado las leyes en favor de los derechos de grupos indígenas de Chihuahua, como tarahumaras, tepehuanes y guarojíos, las organizaciones civiles aclaran que aún falta mucho por hacer.
Sin tener propiedades a su favor reconocidas por las leyes, más de 70 mil indígenas que habitan en la Sierra Tarahumara, sobre todo en tierras irregulares y en terrenos escabrosos, habitan en chozas y cabañas de madera construidas por ellos mismos.
La moneda tradicional que utilizan es la del peso mexicano, aunque al menos el 10 por ciento de ellos siguen manejando la vieja práctica del trueque, ofreciendo sus artesanías a cambio de alimentos ante el escasez de alimentos que sufren por la sequía.
El gobernadorcillo, nombre del dirigente de un grupo de tarahumaras, de la región de Batopilas, Horacio Robles, indicó que trabajan para que en las leyes del hombre se tome en cuenta a los indígenas que habitan de forma ancestral la Sierra Tarahumara.
Desde hace cientos de años esas tierras son habitadas por ellos y piden se respeten los espacios en donde han trabajado y sobrevivido para estar «en paz y sobre todo alejado de la cultura de los Chabochis», como les llaman a los hombres blancos.
Javier Ávila, sacerdote católico que por más de 40 años ha trabajado con estos grupos indígenas, dijo que aunque las leyes de derechos humanos han ido avanzando para defender a estos grupos, aún falta mucho por hacer en favor de ellos en materia de racismo.
Tarahumaras, tepehuanes y guarojíos que habitan en estas tierras de la Sierra de Chihuahua, sufren varios problemas sociales que los obligan a refugiarse en sus comunidades en donde no reciben la atención en materia de salud, alimentación y otros.
Hay casos en que familias enteras mueren sin ser reconocidos como hombres, al no contar con documentos oficiales que los identifiquen como cualquier ciudadano, incluso se les niega atención médica y apoyos de alimentación.
El presidente de la Comisión de Gobernación en el Congreso del estado, Gabriel Sepúlveda, coincidió en los beneficios de una ley para la defensa de los grupos étnicos.
Expuso que esta ley fue aprobada por la anterior Legislatura y refrendada por el Congreso de la Unión y ha sido útil para que los habitantes de estos grupos puedan acoplarse a los cambios que requieren para mejorar sus aspectos político, social y cultural.
Gabriel Sepúlveda indicó que las autoridades de los tres niveles de gobierno han formado un acuerdo común para que cada día los indígenas de Chihuahua tengan sus derechos humanos como cualquier otro grupo social.
El coordinador estatal de la Tarahumara, Jesús Velázquez, señaló que más de 900 mil indígenas de esa etnia habitan en esta entidad.
Consideró que especialmente en las comunidades mas alejadas del estado, deben de tener los servicios básicos para sobrevivir, como lo es la alimentación y educación.
Jesús Velázquez resaltó que a pesar de las leyes que se han aprobado para respetar y apoyar a estos grupos, aún no han llegado a todos los sectores habitados por las etnias.
El proyecto del gobernador César Duarte Jáquez es que antes de concluir su administración, los tres grupos étnicos deberán tener las comodidades básicas, tales como las que tienen los citadinos.
Fuente: http://uniradioinforma.com/noticias/mexico/articulo136183.html